Bueno sobre el relato, la verdad es que me gusta la idea que intentas plasmar, me gusta porque deja entre ver al final que te importa tu sumiso que es algo que la gente suele olvidar, que no son objetos aunque les guste que los usemos como tal, tbn hay que cuidarlos, lo que no me gusta
es que deja muchas cositas en el aire y me picá la curiosidad,
cosas como porqué está mojada o porque está el chico en la cocina lleno de harina pero en terminos generales me mola.
Por otro lado en mi mente perturvada el relato se tornó ligeramente diferente y aunque la primera versión la censuré que me salió muy canario el tema, en plan "chas, loco estaba toda enchumbada, vería fuerte pelete mas chungo " la segunda si la voy a postear (aunque creo que te la mandé anoche).
Estaba a punto de llegar a casa, era de noche, llovía ...
Él sabía perfectamente a que hora estaría allí.
Abrí la puerta y ahí estaba, en la cocina, lleno de harina,
estúpido perro ¿es que no sabe hacer nada bien? pensé para mí.
Opté por no dirigirle la palabra y simplemente me senté en el sofá,
estaba empapada y los cojines, iban camino de lo mismo.
Trás 10 minuto llegó él, tembloroso portaba una toalla mas le retiré la mirada,
no se merecía un premio tras su tardanda. Comenzó por quitarme las botas, a continuación la chaqueta ... No le permití me que quitara nada mas.
Empezó a secarme meticulosamente los pies y luego, continuó subiendo por mis blancas piernas hasta mi rodilla,
pobre infeliz, no sabía lo que le esperaba. Me entretuve pellizcandolo durante su labor y en un momento de despiste,
le arrebaté fugazmente la toalla, lo postré a mis pies. Le puse un pié en encima y
le propiné una serié de golpes en las nalgas hasta que quedó del color de mi agrado, un tono melocotón aproximadamente.
Una vez terminado ese fugaz divertimeno le agarré con mis manos frias por las inclemenciás meteorológicas
la cabeza y le apreté los mofletes, dejandole una patética carita de pezcadito que tanto me divierte observar, indefenso...
Le ordené que me prepara mi tan ansiado baño caliente, al fin y al cabo estaba fria y empapada , los azotes me habían
hecho entrar en calor pero no era suficiente, me apetecía desnudarme y relajarme en la bañera...
Pasaron los minutos y cuando se volvió a acercar todo estuva listo, me dijo cabizbajo:
"Su baño está listo Ama". Comencé a desnudarme muy lentamente ante sus atónitos ojos, me encanta ver como
se desconsuela sin poder hacer nada, deseoso, impaciente, impotente ...
Le puse en su lugar, en el suelo, a 4 patas y le hice seguirme hasta el cuarto de baño
como un buen perro pero no me iba a contentar solo con eso ...Cuando llegué el agua estaba caliente, me encanta esa sensación recorriendo mi cuerpo, fué entonces cuando mi perro intentó enjabonarme así que abrí la ducha con el agua helada y lo empapé, así entendería lo que se siente al llegar empapada tras caminar bajo la lluvia,
si hubiera sido un buen perro me habría estado esperando en el lugar adecuado aún sin haberselo pedido con un paraguas pero no, no lo hizo y ahora le tocaba expiar su pecado.
Intentó escapar pero rápidamente comprendió que no podía hacerlo así que se sentó en seiza (de rodillas), agachó la cabeza como un perro regañado y esperó a que acabara su calvario.
Cerré el grifo cuando estuve satisfecha y entonces prosiguió su tarea, una vez acabó salí de la bañera, me secó y ya complacida
lo agarré lo miré fijamente y empecé a secarlo yo a él, no dijo nada pero sus ojos estaban mas que agradecidos.
En fin en mi mente pasan aún mas cosas pero como le de rienda suelta no acabo nunca xD
Saludos
PD: sigo sin aclararme con alguna cosilla del foro a ver si no me queda desforme el texto y se lee bien sin tener que tirar de las barritas deslizantes