Empezando la casa... pero no por el tejado

[Hipuquema]

ander, ante todo, le devuelvo el saludo.
Como ya comenté en respuesta a WALKYRIA con lo de la coherencia, la Humildad, es mi política (parece que me estuviera promocionando para un "meeting" político, qué mal...), suelen decir de mí que soy transparente (que no traslúcido... dios, estoy haciendo chistes malísimoss, jajaja).
Agradezco profusamente, por una parte, sus expectativas de que consiga llegar a ser un "Gran Dominante" (admito que mi ego se enalteció cuando lo leí, jeje), y por otra parte, los artículos que ha facilitado. Son realmente interesantes, los he releído ya un par de veces (más de dos en Canarias), y no dejan de impresionarme cada vez que los leo; me enseñan que tengo mucho que aprender. Me han servido de muchísima ayuda, muchas gracias.

[Hipuquema]

Muy buenas noches, PedroRM,

Ha hecho un aporte que me ha parecido muy interesante, ya que este tema fue el que me incitó a abrir este post. Así que si no le importa, voy a debatir y a divagar un poco con usted, si le parece, pero no se lo tome como un ataque, sino más bien como si estuviera oyendo a un loco pensando en voz alta.

Si la práctica fuera tan sencilla como lo es la teoría en lo que se refiere a la psique de los seres humanos en las relaciones interpersonales, estaría de acuerdo con su persona cuando hace un llamamiento al sentido común para no caer en un "juego peligroso". Sin embargo, la lógica es un zumbido distante cuando tiene a la pasión delante; el sentido común se distorsiona o queda totalmente eclipsado por el Amor cuando éste entra en escena; es por eso que en una pareja D/s, si el/la sumisx está enamoradx incondicionalmente de su Amx, estx últimx podría aprovechar esta situación para hacer de su sumisx lo que le venga en gana... pero una buena forma de evitar esa situación, es lo que sentencia: "el dominante debe amar a su sumis@ más profundamente que como aman otros hombres".
Y concuerdo totalmente cuando dice que el dominante debe conocer la mesura de las pasiones que se inflingen o premian a su amad@. Es más, me atrevería a decir que es su deber, el de indagar en la psique de su sumisx, no para "manejarlo" cual titiritero, sino más bien, para conocer sus necesidades, y modular, desde este conocimiento, el castigo/recompensa que merezca.

Tan solo es una vomitona mental, así que invito a que refuten, debatan, divaguen, que así aprendemos y nos conocemos todos un poco más.
Un fuerte saludo a todxs.

[PedroRM]

He de darte la razón, Hipuquema. Cierto es que el Amor espanta todo acto de cordura, y que sólo alguien en su sano juicio podrá hacer buen uso de su sentido común. Eso no significa que un enamorado no sepa distinguir lo correcto de lo disparatado, sino que aún a sabiendas de lo que es sensato sentirá un impulso irrefrenable de hacer justamente lo contrario. Pero esa enfermedad no tiene cura, así que de qué preocuparse.
No obstante en tu caso (si me permites tratarte de tú), te veo lo bastante bien amueblado como para tomar buenas decisiones, y que en un eventual encuentro con tu sumisa sabrás anteponer la mesura y el respeto ante cualquier acto de despecho o de abuso posesivo. Lo que venga después será a resultas de una ciencia inexacta que como tú bien dices no le será de aplicación una teoría tan cuadriculada.
Además me gustaría puntualizar que la edad de la persona y la experiencia son factores determinantes a la hora de llevar las riendas de las pasiones. Un amor a los quince años es tan hormonal que puede acabar en tragedia, como Romeo y Julieta, un amor a tu edad aún puede hacerte perder toda razón, pero a medida que se hace uno mayor es más difícil perder el timón y es mucho más fácil apelar al sentido común, a nuestro pesar. El amor incondicional es más propio de la juventud, y es por eso que cuando nos enamoramos siendo mayores tenemos la sensación de volver a los quince años, y alguno hasta se avergüenza de ello.
Tú adelante y luego danos una lección con tu experiencia, que seguro que te desenvuelves mejor que nadie.