Excepto para los que llevan el deporte en la sangre, quemar calorías suele involucrar ejercicios desagradables que nadie quiere hacer. Sin embargo, para quien se preocupa por bajar un par de kilos, el sexo puede ser la mejor alternativa, ya que además de placentera es una de las actividades físicas más sanas que existen. Estos son algunos datos que encontré y quisiera compartir...
Empecemos por el principio (para variar, prometo que en algún otro post empezaré por el final).
Al acercarnos a una persona que nos gusta, el corazón empieza a latir más rápido y los vasos sanguíneos se dilatan, especialmente en las zonas genitales. Esto ya consume energía y, por lo tanto, quema calorías, además de oxigenar el organismo y de darle placer al cerebro a través de los sentidos y de las sustancias químicas que se empiezan a segregar. Aún no hemos hecho nada, y ya estamos adelgazando. Imaginate lo que se viene...
El beso
Un beso consume hasta 5 calorías por minuto. O sea que un beso de 24hs te deja con casi un kilo menos. No está nada mal. Claro que ese beso probablemente te mate antes de que te des cuenta de haber adelgazado. Pero, siendo más realistas, un buen beso diario (de 20 minutos, digamos) lleva a perder un kilo en unos 80 días, el tiempo necesario para dar la vuelta al mundo en globo.
Claro que estamos hablando de un beso apasionado, como debe ser, que incluye a la lengua, a la totalidad de los labios y a los músculos de la cara y de la garganta. Veinte minutos de este ejercicio pueden no ser fáciles de lograr, pero definitivamente prefiero eso antes que estar esos mismos minutos en un gimnasio y rodeado de gente traspirada que no es para nada agradable de ver. Pensándolo bien, creo que voy a poner mi propio gimnasio de besos; sería un éxito. En fin, no hace falta besar tanto, especialmente luego de que a los pocos segundos uno probablemente ya está pensando en los ejercicios siguientes...
Las caricias
Bienvenidos a mi ciber-gimnasio. A ver, gorditos y gorditas, ahora nos vamos a acariciar. Cambiaremos la música a algo más romántico -pero también enérgico e impredecible-, y siguiendo su ritmo con movimientos suaves acariciaremos toda la superficie del ser que tenemos delante (esto se pone cachondo).
Pero, ¿qué es acariciar? No es sólo pasarle la mano a un perro, es mucho más que eso: es viajar por sobre el otro sin destino, jugarle adivinanzas e iluminar su piel, con-fundir límites entre yoes y quemar entre 20 y 40 calorías en un par de minutos.
Para bajar un kilo de peso, es necesario quemar alrededor de 8.000 calorías, así que, sumando las caricias al beso del ejercicio anterior, tardarás poco más de dos semanas en deshacerte del kilo de más. Eso sí: a tu pareja dale chocolates, porque cuánto más superficie haya por acariciar, más rápido se irán tus rollitos.
Desvestir al otro
Desvestirse uno mismo es fácil, especialmente para los hombres: tiramos todo en cualquier parte y pasamos a la acción, como si tuviéramos que rescatar a un gatito que se está ahogando. Pero quitarle la ropa al otro es más bien complicado, y hasta puede requerir un posgrado en apertura de cajas fuertes (dicen que Houdini nunca encontró la forma de dejar en tetas a su mujer). No, en serio: quitar un corpiño (sujetador, brassiere o sostén) con una sola mano gasta al menos 12 calorías.
Además, por supuesto, es excitante desvestir y descubrir poco a poco el otro cuerpo que se arquea y suspira, como desenvolviendo un regalo. Y en este sensual proceso pueden liberarse hasta 120 calorías (por eso Houdini desapareció sin dejar rastros). 120 calorías en el supuesto caso de que ella o él estén de acuerdo con dicha actividad. Según mis cálculos, intentar desvestir a un extraño puede hacernos quemar 480.000 calorías, incluyendo esquivar las balas de la policía.
La penetración* Sin contar la energía necesaria para desenvolver y poner el preservativo en su lugar, las calorías perdidas durante el sexo pueden variar mucho de acuerdo a la posición adoptada, la fuerza que haga cada uno y la distancia a la que se esté de la Tierra.
Para ser más precisos: la famosa postura del misionero se lleva 250 calorías en 20 minutos. Esto es 12 calorías por minuto, incluso más efectivo que caminar o subir escaleras el mismo lapso de tiempo. No, Amelia, tenés que moverte un poco, si no no pasa nada.
El 69, aunque no parezca, consume 78 calorías por minuto, ya que también incluye a los ejercicios anteriores. La postura del perrito (el mejor amigo del hombre), por el esfuerzo muscular que demanda, puede quemar más de 350 calorías. Agreguemos un par de cachetazos o latigazos y el ejercicio está completo. * Todos los números se multiplican por 10 si no hay una erección de por medio.
El orgasmo
Acabemos de una vez: el final del entrenamiento es el orgasmo, que puede quemar entre 20 y 120 calorías, dependiendo de su intensidad. Y, aunque cueste creerlo, un orgasmo fingido quema más del doble que un orgasmo real (de todas maneras, es una práctica desagradable que no aconsejo, menos a hombres).
Paréntesis: mientras investigaba para este post, aprendí que lo que produce el orgasmo en el cerebro es técnicamente llamado "delirio", o sea, una forma leve y momentánea de locura. Fin del parénteis.
En resumen: es posible quemar unas 500 calorías cada vez que se hace el amor, comenzando con un simple beso y terminando... bueno, terminando. Es decir que se pueden bajar un par de kilos al mes haciendo algo de lo más hermoso que existe.
Fuente: Cibermitanios